Desde la Comunidad valenciana

Cantó y Asunción hacen 'puenting'

POR RAFAEL NAVARRO

LA NUEVA oferta política va a desviar en algunas ciudades y autonomías el foco de atención de los grandes partidos a los nuevos candidatos. Es lo que puede suceder en Valencia ciudad con Toni Cantó, previsible candidato por UPyD a disputar la Alcaldía a Rita Barberá, y con Antonio Asunción, el número dos de la oferta nacional de Ciutadans que cuenta todavía con un importante tirón dentro del socialismo valenciano.

A día de hoy, Cantó cuenta con opciones de poder ser alcalde de Valencia. No es ciencia ficción. Las encuestas auguran un ajustado triunfo del tripartito formado por el PSOE, Esquerra Unida y los nacionalistas de Compromís tanto en Valencia como en la Generalitat. A un año y medio vista y con una ventaja muy ajustada de sólo tres diputados, todos los partidos consideran que hay partido y que un pacto PP y UPyD también podría ser factible. Pero en ambos bandos la determinación de los minoritarios es tal que tanto Compromís como UPyD podrían exigir la Alcaldía de la ciudad a cambio de dar al PSOE o al PP, respectivamente, la llave para gobernar la autonomía. De ahí que Cantó, a día de hoy, tenga opciones ciertas de poder ser alcalde.

Sin embargo, la irrupción de Ciutadans con el ex ministro socialista valenciano Antonio Asunción como segundo pilar tras Albert Rivera, abre nuevas expectativas. El PSOE cree que UPyD puede quedarse con votos de desencantados del PP que, de no existir la opción magenta o de no tener un cartel como Toni Cantó, podrían recalar en los socialistas. La formación de Rosa Díez, por tanto, rompe el puente de transferencia de votos directa.

Y desde el PP se ve a Antonio Asunción como una amenaza de votos para el PSOE regional, de donde fue expulsado por su actitud en el último proceso de primarias, donde estuvo a punto de presentar candidatura alternativa.

Cantó y Asunción, por tanto, van a ser centro de los focos mediáticos y de los dardos de los dos grandes partidos, pero esa exposición no les garantiza ningún éxito. UPyD aparece en las encuestas con un porcentaje cercano al 6% de los votos, en una región donde el suelo electoral necesario para entrar en la cámara regional es del 5%, en lugar del 3% que mantienen muchas autonomías. Ese elevado 5%, junto a la rivalidad que mostrarán por el mismo electorado UPyD y Ciutadans y unido al hecho de que el suelo electoral nunca haya permitido más de cinco partidos representados en el parlamento autonómico, colocan a Cantó y Asunción en una situación de máximo riesgo. Pueden ser llave; pueden romper los puentes de transferencia directa de votos... pero también pueden hacer puenting y caerse al vacío al quedar uno o los dos partidos a los que representan fuera del escenario político. Hasta mayo de 2015 no se despejarán la incógnitas.